dilluns, 7 de maig del 2012

APROXIMACIÓN A LA ETIOLOGÍA DE LA TENDINOPATÍA ROTULIANA


La tendinopatía rotuliana no sólo se manifiesta en deportistas, individuos físicamente inactivos también lo sufren. Se puede afirmar que la actividad física no se puede asociar directamente a la histopatología y que el ejercicio físico puede ser más importante en la provocación de los síntomas que en ser el causante de la lesión. La sobreutilización induce esta condición, pero la etiología y la patogenia no están científicamente clarificadas.

A nivel del tendón rotuliano se considera que el aparato extensor de rodilla se ve sometido a determinados traumatismos repetidos, repentinos y balísticos con momentos de fuerza muy elevados. En individuos en edad de crecimiento las tendinopatías a nivel de este tendón se presentan en puntos de osificación secundaria, bien en la tuberosidad anterior de la tibia (enfermedad de Osgood-Schlatter) o en el polo inferior de la rótula (Sinding-Larsen-Johansson).

Las lesiones tendinosas suponen aproximadamente un 6% de todos los tipos de lesiones deportivas, lo cual supone una gran cantidad de lesiones/año.

Existen múltiples teorías que pretenden explicar cómo se genera una tendinopatía, pero actualmente la más aceptada es la del agotamiento por sobreuso, que conlleva un aumento de la rigidez muscular con una disminución de la extensibilidad del complejo músculo-tendinoso y una menor capacidad de contracción rápida que hace que aumente la tracción sobre el tendón.

El control de los factores de riesgo es indispensable en cualquier tipo de lesión. A nivel del tendón rotuliano existen una serie de factores intrínsecos y extrínsecos que pueden contribuir de manera clara al desarrollo de esta patología como pueden ser asimetrías en extremidades inferiores, alteraciones de la marcha...

Diversos autores vinculan la tendinopatía rotuliana con disminuciones musculares del cuádriceps, condropatias rotulianas e hipermovilidad de la rótula. A pesar de esto, el principal factor etiológico, se considera que es la desaceleración en el momento del aterrizaje en el suelo tras un salto. Lo que parece claro es que existe una clara relación entre los desajustes biomecánicos de la rótula y las tendinopatías de inserción rotuliana.





En relativamente poco tiempo aparecerán publicadas diferentes guías donde se indica cómo se realiza el diagnóstico y el tratamiento de esta patología.